Esta sección destaca la importancia del bandoneón en la cultura musical del Uruguay, no solo en el ámbito de la música típica ciudadana, sino también en la música del interior. Demuestra la diversidad del instrumento, tanto para el ámbito bailable como para la intersección de música erudita y música típica en obras originales de compositores uruguayos.
A principios del siglo XX el bandoneón empezó a difundirse en Uruguay, por medio de tiendas y casas de música, en Montevideo y en las ciudades limítrofes con Argentina. (DUNKEL, 1993) El bandoneón brindaba más posibilidades armónicas y melódicas que el acordeón diatónico, con setenta y un botones bisonoros. Como en el acordeón de botón, cada botón individual produce dos tonos distintos según el músico esté cerrando o abriendo el fuelle.